Bienestar Subjetivo Infantil y Familia

  • 09 de Agosto de 2017
  • por Paula Medina L.

En una sociedad cada vez más competitiva y exigente en lo académico, social, económico y otros es necesario detenerse y reflexionar acerca del bienestar (“De bien y estar”). El bienestar subjetivo se refiere a las evaluaciones (positivas o negativas) que las personas efectuamos respecto a nuestras vidas, ya sea como un todo o respecto a ámbitos específicos (salud, trabajo, el barrio en el que vivimos entre otros). Otros autores agregan, que el bienestar subjetivo sería como una especie de balance emocional y cognitivo que las personas haríamos y que daría cuenta de la evaluación global que hacemos acerca de la calidad de nuestras vidas ante circunstancias vitales (Seligson, Huebner & Valois, 2003, Diener 1994). Históricamente este tipo de estudios se han realizado en Chile o en el extranjero en población adulta, en donde, se le solicita a las personas informar, a través de encuestas, acerca de cómo evalúa su calidad de vida, obteniéndose así índices de bienestar, pero ¿Que sabemos de bienestar subjetivo infantil y de bienestar subjetivo infantil en Chile?

En el año 2012 se realizó en Chile el 1er Estudio Nacional de Bienestar Subjetivo Infantil como parte del Estudio Internacional sobre Bienestar Infantil, por investigadores de USACH y UDD, bajo el patrocinio de UNICEF-Chile. La importancia de este tipo de investigaciones es que nos permiten acceder a información que, comúnmente, no es incorporada en la toma de decisiones que afectan directamente la vida de niños y niñas y plantean que a través de ellas se puede conocer la calidad de vida “realizada” en un país (Veenhoven, 1994). Además permitiría a nivel público y privado, tomar medidas a nivel de prevención, detección temprana e intervención en poblaciones de riesgo, permitiría avanzar en el reconocimiento de los niños y niñas como “sujetos de derecho” y reorientar las políticas acerca de la infancia.

Esta encuesta de bienestar subjetivo, se realizó con niños de 8 a 13 años (3° a 7° Básico) de establecimientos municipales, particulares subvencionados y particulares pagados de la Región Metropolitana, de Valparaíso y del Bio Bio, donde un 53, 1% eran niños y un 46, 9 % eran niñas. Esta evaluación indaga acerca de las percepciones sobre satisfacción en distintos contextos: relaciones familiares, en la escuela, con sus pares, uso del tiempo libre, relación con su barrio y sentimientos consigo mismo. A nivel de las relaciones con su familia, arrojó que un 91% de los niños y niñas se sienten seguros en casa, un 84% consideran que sus padres o cuidadores los escuchan y tienen en cuenta, un 84% considera que lo pasan bien todos juntos en su familia, un 90% considera que sus padre o cuidadores los tratan bien, entre otros resultados.

Se podría agregar que a nivel familiar, saber cuáles son las percepciones sobre satisfacción acerca de las relaciones familiares de nuestros hijos, nos debería permitir: empatizar, legitimar y respetar su opinión, nos da la posibilidad de dialogar y otorgar sensación de pertenencia. Además nos debería reorientar (si es que es necesario) nuestro enfoque de uno déficit a uno centrado en las fortalezas familiares junto con fortalecer los vínculos afectivos; acercarnos, cohesionarnos y establecer compromisos familiares.


Paula Medina Lema
Psicóloga USS
Magister en Psicología, Mención en Psicología Clínica UC
Docente, Facultad de Psicología de la USS